Runas medievales
En la Edad Media para cubrir las deficiencias de representación se introdujeron variantes puntuadas de los caracteres que representaban consonantes sordas para crear sus homólogas sonoras, y viceversa, y se añadieron varias runas para cubrir todos los sonidos vocálicos. No se siguió un patrón único y las inscripciones rúnicas escandinavas de la edad media muestran muchas variantes de los tipos de runas, y a menudo las equivalentes a las letras s, c y z se usan de forma intercambiable.
Las runas medievales estuvieron en uso hasta el siglo XV. La mayoría de las inscripciones rúnicas escandinavas conservadas datan del medievo, aunque hay también algunas inscripciones en latín. Lo que indica que las runas fueron de uso corriente en la edad media y convivieron con el alfabeto latino durante varios siglos.
Runas dalecarlianas
El aislamiento de la provincia sueca de Dalecarlia hizo que se desarrollara allí un tipo rúnico propio, mezcla de runas y letras latinas. Las runas dalecarlianas empezaron a usarse al principio del siglo XVI y se siguieron usando hasta el siglo XX, principalmente para la transcripción del idioma local, el elfdaliano. Se ha polemizado sobre si su uso fue una tradición ininterrumpida o si la gente del siglo XIX y XX reintrodujeron su uso aprendiendo las runas de tratados sobre el tema.
En la Edad Media para cubrir las deficiencias de representación se introdujeron variantes puntuadas de los caracteres que representaban consonantes sordas para crear sus homólogas sonoras, y viceversa, y se añadieron varias runas para cubrir todos los sonidos vocálicos. No se siguió un patrón único y las inscripciones rúnicas escandinavas de la edad media muestran muchas variantes de los tipos de runas, y a menudo las equivalentes a las letras s, c y z se usan de forma intercambiable.
Las runas medievales estuvieron en uso hasta el siglo XV. La mayoría de las inscripciones rúnicas escandinavas conservadas datan del medievo, aunque hay también algunas inscripciones en latín. Lo que indica que las runas fueron de uso corriente en la edad media y convivieron con el alfabeto latino durante varios siglos.
El aislamiento de la provincia sueca de Dalecarlia hizo que se desarrollara allí un tipo rúnico propio, mezcla de runas y letras latinas. Las runas dalecarlianas empezaron a usarse al principio del siglo XVI y se siguieron usando hasta el siglo XX, principalmente para la transcripción del idioma local, el elfdaliano. Se ha polemizado sobre si su uso fue una tradición ininterrumpida o si la gente del siglo XIX y XX reintrodujeron su uso aprendiendo las runas de tratados sobre el tema.
No hay comentarios:
Publicar un comentario