En islandés,
Kindur significa oveja y este es un espectáculo dedicado a Islandia vista a través de los ojos de una de sus ovejas aventureras. Todo el territorio de esta isla está impregnado con la atmósfera de un cuento de hadas. Desde el blanco de sus glaciares a las auroras boreales, de los géiseres al estruendo de las cascadas gigantes, este es un país donde cada elemento natural parece animado por fuerzas misteriosas.
Tomemos las ovejas: encerradas en un corral durante la temporada fría, pueden saborear la libertad plena viajando solas o en pequeños grupos desde la primavera hasta el otoño. En su viaje tiene la oportunidad de sumergirse dentro de la más remota naturaleza y visitar sus habitantes 'ocultos', elfos y trolls. En su viaje los protagonistas de las ovejas 'Kindur' nos muestra ese mundo secreto, fuerte y frágil al mismo tiempo, capaz de comunicar a los niños la extraordinaria belleza de la naturaleza.
Esta historia está contada por tres bailarines que interpretan tres ovejas. Lo que hace el programa especial es que todo el público es invitado a formar parte de una gran manada de ovejas. Al entrar, a cada niño se le da un corazón especial, es un corazón de lana que se enciende cuando es el momento de tomar parte activa en el show. En algunos casos los niños son invitados al escenario en pequeños grupos, en otras ocasiones todos los corazones se iluminan al mismo tiempo, y esto significa que es posible interactuar con el escenario, juntos, desde nuestros asientos.
Para este proyecto, la compañía italiana Tpo ha ideado un escenario "sensible" donde el público, especialmente las generaciones más jóvenes, pueden entrar, sumergirse en los diversos ambientes naturales y jugar de forma interactiva gracias a la utilización de sensores digitales y de cámaras equipada con dispositivos de movimiento. Dentro de este espacio el público y los intérpretes pueden dibujar, producir sonidos, interactuar con las imágenes o los elementos presentes en el escenario.
vídeo con un resumen de 10 minutos (la obra dura 50)
dirección artística de Francesco Gandi, Davide Venturini
coreografía de Ana Balducci, Erika Faccini, Paola Lattanzi
danza Erika Faccini, Valentina Caini, Valentina Consoli
diseño digital Elsa Mersi
ingeniería informática Rossano Monti, Martin von Gunten
diseño de sonido Spartaco Cortesi
sonido / vídeo consola Massimiliano Fierli, Andrea Fincato
trajes Fiamma Ciotti Farulli
apoyos Livia Cortesi
la colaboración en el concepto de Stefania Zampiga
gestión Valeria Castellaneta, Valentina Martini, Francesca Murador, Chiara Saponari
una coproducción con el Teatro Metastasio Stabile della Toscana
compañía TPO (Italia)